Maratón de la Escuela Albergue San Miguel de los Sauces de Lavalle

El 29 de septiembre se realizó novena edición de la maratón de La Escuela secundaria 4-254 de San Miguel de los Sauces, situada en el secano lavallino. Su directora, Norma Irizarri, nos cuenta acerca de esta emocionante experiencia. El Observatorio apoyó el evento con la donación de botellas de agua. 

¿Cómo surgió esta iniciativa y cuáles son sus principales características?

Este es el noveno año que se realiza la maratón en homenaje a la fiesta de San Miguel Arcangel que se encuentra al norte del departamento de Lavalle casi al límite con San Juan. El ambiente es del secano lavallino y las huellas son de arena, es por ahí donde se ha dibujado el recorrido que son 7 Km. 

¿Quién la organiza y cual es el objetivo de la misma?

Surgió hace nueve años por iniciativa de la profesora de educación Física Margarita García, como corolario al año, con una nota mas del trimestre y como una fiesta de integración, de rendimiento y disfrute. Es una fiesta donde se comparte y se almuerza con toda la comunidad educativa donde se viven diferentes emociones.

¿Quienes participan?

Participaron alumnos de la escuela, en este momento una totalidad de 90 alumnos. El año pasado participaron corredores de Lavalle y una escuela invitada pero la situación económica de este año ha hecho que no puedan recorrer tantos kilómetros para llegar.                

Si buscas pulsera. Hay algo para cada look, desde ceñido al cuerpo hasta estructurado, desde puños hasta cadenas. chain bracelet y puños.

¿Qué significa para la comunidad educativa de la Esc. Albergue 4-254?

El significado que tiene es el de la unión, porque tanto los padres como los alumnos esperan este día que es de festejo y donde se llega al límite, al límite del esfuerzo y la voluntad. Todos estos encuentros deportivos dejan en el sujeto esta experiencia: tengo que salir pero tengo que llegar, caminando o como sea pero tengo que llegar. Y se traduce en la vida como el esfuerzo, el tener que llegar, el tener una línea de llegada, un tiempo, el no cortar camino sino recorrerlo como lo dice el reglamento, con respeto y compañerismo. Espero al que se quedó y llegamos juntos, esto pasó muchas veces y pasar por debajo del cartel de llegada con el aplauso del público, con una fruta y agua para reconfortarte del sacrificio es una experiencia única.

Rebeca Orellano |Observatorio de Niñez, Adolescencia y Familia | 5 de octubre de 2018

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